El primer ministro designado de Israel, Benjamin Netanyahu, obtuvo una prórroga adicional de diez días para formar gobierno con sus aliados de extrema derecha y religiosos, informó el presidente Isaac Herzog.
El jueves, a menos de tres días de que venciera el plazo para conformar una bancada mayoritaria en la Knesset (Parlamento), Netanyahu pidió un plazo de dos semanas para alcanzar un pacto de gobierno con otros partidos.
“Le concedo un periodo de diez días, es decir, hasta el miércoles 21 de diciembre, para presentar un gobierno”, le escribió Herzog al primer ministro designado, en una carta difundida por su oficina.
El Likud, partido de Netanyahu, quedó primero en las elecciones legislativas del 1 de noviembre, con sus aliados de ultraderecha y los ultraortodoxos, y recibió el encargo de formar gobierno en un plazo de 28 días, con la posibilidad de solicitar una prórroga de 14 días de ser necesario.
“Estamos en medio de negociaciones y hemos hecho muchos avances, pero en vista del ritmo de las cosas, necesitaría todos los días de la prórroga previstos por la ley para formar gobierno”, le había indicado Netanyahu a Herzog en una misiva enviada ayer.
Herzog instó a Netanyahu a respetar la “diversidad” del país a la hora de formar una coalición gubernamental, “por el bien de la sociedad israelí en su conjunto”, consignó la agencia de noticias AFP.
“Le concedo un periodo de diez días, es decir, hasta el miércoles 21 de diciembre, para presentar un gobierno”Herzog
Hasta ahora, se sabe que el Likud otorgó varios ministerios sensibles a personalidades controvertidas como Itmar Ben Gvir, un pilar de la ultraderecha hostil a los palestinos, y a Avi Maoz, conocido por sus posiciones contra el colectivo LGTB (lesbianas, gays, trans y bisexuales).
Después de firmar acuerdos de coalición con tres formaciones de ultraderecha –Sionismo Religioso, Fuerza Judía y Noam-, el Likud debe concluir sus discusiones con los partidos ultraortodoxos Judaísmo Unificado de la Torá (UJT) y Shass (sefardí).
En las reuniones, se puso la condición de que el líder de Shass, Arié Dery, sea nombrado viceprimer ministro.
Sin embargo, para ello el Likud tendría que enmendar una ley, pues Dery fue inculpado por fraude fiscal y, según la legislación vigente, no puede acceder a ningún puesto ministerial, aunque sí ser diputado.
El Likud y sus aliados tienen mayoría en el Parlamento, por lo que se espera que intenten enmendar esa ley a partir de la semana que viene.