‘Tragones y mazmorras’ es más que un simple aperitivo. Una formidable serie de fantasía con un lore riquísimo que explota lo mejor del género

Estaba
entre
las
series
de
anime
más
esperadas
de
2024,y ‘Tragones
y
mazmorras‘

(‘Dungeon
Meshi’)
ha
ido
demostrando
con
cada
nuevo
capítulo
que
todo
el

hype
estaba
justificado.

La
trama
sigue
a
un
grupo
de
aventureros
encabezado
por
un
guerrero
humano
llamado

Laios,
que
se
da
de
bruces
contra
un
dragón
rojo
y
salen
escaldados.
Pierden
sus
pertenencias,
sus
provisiones,
y
la
hermana
de
Laios,
Falin,
es
devorada
por
la
bestia…
Así
que
el
grupo
se
desbanda
pero
Laios,

la
maga
Marcille
y
el
pícaro
Chilchuck
deciden
aventurarse
de
nuevo
en
el
interior
de
la
mazmorra
para
intentar
salvarla.
Por
suerte,
por
el
camino
conocen
a
un
enano
llamado

Senshi
que
les
enseña
cómo
sobrevivir
en
las
profundidades.

Reúne
a
tu
grupo
antes
de
continuar

Cuando
se
estrenó
‘Tragones
y
Mazmorras’
en
Netflix
allá
por
febrero,
ya
os
conté
que
el
anime
me
estaba
pareciendo
una
delicia
(ajajá),
y
desde
entonces

mi
amor
por
esta
serie
solo
ha
aumentado
cada
semana.

Es
un
anime

divertido
y
encantador,
co
un
festival
de
personajes
carismáticos
que
te
enganchan
desde
el
primer
momento,
en
especial
el
grupo
de
Laios,
y
que
sabe
equilibrar
muy
bien
esa
cierta
cotidianidad
con
los
momentos
de
acción.
Si
estamos
todavía
pensándonos
si
entrar
en
el
mundo
del
anime,
‘Tragones
y
mazmorras’
es
perfecto
y
muy
accesible
y
encima
ha
ido
llegando
doblado
cada
semana,
con
lo
que
es
una
apuesta
ideal.

Ahora
bien,
además
de
los
momentos
más
cuquis
con
los
protagonistas
cocinando
y
acampando
tan
tranquilos, ‘Tragones
y
mazmorras’
es
una
historia
de
fantasía
pura
y
dura,
y
ha
ido
sacando
la
artillería
con
su
segunda
mitad
de
temporada.

El
manga
de
Ryoko
Kui
se
nutre
muchísimo
de ‘Dungeons
&
Dragons’
y
videojuegos
clásicos
de
rol,
y
se
pueden
ver
sus
influencias
por
todas
partes.
Aunque
de
entrada ‘Tragones
y
mazmorras’
parecía
un
anime
muy
tranquilito,

ha
ido
volviéndose
más
turbio
con
sus
toques
de
fantasía
oscura,
demostrando
que
en
la
mazmorra
nada
es
lo
que
parece
y
que
tenemos
una
historia
muy
cruda
detrás.

Si
ya
nos
picaba
el
gusanillo
con
el
planteamiento
de
la
historia
y
sus
personajes, ‘Tragones
y
mazmorras’
te
termina
de
atrapar
del
todo
gracias
al

lore
tan
rico
que
oculta
y
del
que
ya
nos
ha
ido
dando
cucharaditas.

Desde
elfos
de
tierras
lejanas,
enanos
de
las
profundidades
con
inventos
muy
steampunk,
y
también “orientales”
con
sus
propias
criaturas
y
tropos. ‘Tragones
y
mazmorras’
no
se
ha
quedado
solo
en
la
mazmorra
y
nos
ha
demostrado
que
tiene
un
mundo
lleno
de
posibilidades.
Y
que
aún
quedan
muchos
secretos
por
explorar
según
nos
adentremos
más
y
más
en
sus
profundidades.

Porque
además
de
a
todos
los
monstruos
y
peligros
a
los
que
ya
se
enfrenta
el
grupo
de
Laios,

el
Amo
del
Calabozo
(o
Señor
de
la
Mazmorra…
o
Dungeon
Master,
como
queramos
llamarlo)
se
está
perfilando
como
el
gran
villano
de
la
historia
y
no
les
va
a
poner
las
cosas
fáciles
para
recuperar
a
Falin.

Quizás
la
gran
pega
del
anime
es
que
a
pesar
de
venir
de

Studio
Trigger,
el
estudio
que
nos
ha
dejado
joyitas
como ‘Cyberpunk:
Edgerunners‘
y ‘Promare’,

parece
que
no
se
le
ha
sacado
todo
el
potencial
que
se
podría
a
la
animación.
Sí
que
tenemos
secuencias
loquísimas
en
las
que
se
ve
cómo
brilla
el
estudio,
pero
en
general
sí
que
se
queda
un
tanto
limitadito
durante
gran
parte
de
la
serie.

Aún
así,
la
estética
de ‘Tragones
y
mazmorras’
es
impecable
y
junto
con ‘Frieren‘
puede
presumir
de

estar
resucitando
el
género
de
fantasía
más
allá
de
los
chopocientos
isekais
que
nos
saturan
cada
temporada.

La
segunda
temporada
ya
está
confirmada,
y
aunque
todavía
no
hay
fecha
de
estreno
ya
se
ha
colado
entre
los
animes
que
espero
con
más
ganas.
Porque
no
podemos
volver
a
la
mazmorra
lo
suficientemente
rápido
para
rescatar
a
Falin
(y
ver
qué
platillo
nuevo
se
saca
Senshi
de
la
manga).

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