Denis
Villeneuve
es
uno
de
los
directores
más
brillantes
de
la
actualidad,
algo
que
no
ha
surgido
por
casualidad.
Después
de
sus
dos
primeras
películas
–Un
32
août
sur
terre
y
Maelstrom–
decidió
que
no
era
el
realizador
que
quería
ser,
así
que
pasó
los
siguientes
10
años
sin
rodar.
Cuidando
a
sus
hijos
mientras
su
mujer
trabajaba
y
aprendiendo
sin
parar.
Se
formó
junto
a
otros
directores,
trabajó
en
el
teatro,
volvió
a
la
facultad…
Vio
mucho
cine
y
analizó
centenares
de
escenas.
Así
es
como
ha
podido
firmar
obras
maestras
de
la
ciencia
ficción
como
la
saga
Dune
o
La
llegada.
Acaba
de
salir
su
vídeo
de
The
Criterion
Closet,
por
donde
figuras
de
la
industria
del
cine
pasan
y
hablan
de
sus
títulos
favoritos,
y
ha
sido
muy
específico
en
sus
elecciones.
Entre
las
películas
que
ha
querido
destacar
está
Che,
dirigida
por
Steven
Soderbergh
y
estrenada
en
2008.
Para
él,
es
la
mejor
película
de
guerra
que
se
ha
hecho
nunca.
Es,
de
lejos,
una
de
las
mejores
películas
de
guerra.
Sobre
qué
es
ser
el
líder
de
los
hombres.
La
investigación
detrás
la
película
es
fascinante
y
adoro
totalmente
la
dirección.
Creo
que
es
una
película
que
está
infravalorada.
Sinceramente,
es
una
obra
magistral
de
Soderbergh.
Mi
película
favorita
de
Soderbergh
Che
es
una
película
biográfica
dividida
en
dos
partes
que
se
centra,
como
su
propio
nombre
indica,
en
el
revolucionario
argentino
Ernesto
Guevara
y
la
Revolución
cubana
y
el
intento
de
llevar
lo
mismo
a
Bolivia.
El
guion
era
tan
largo
que
tuvieron
que
dividir
la
película
en
dos
partes,
aunque
se
proyectó
como
una
sola
película
en
el
Festival
de
Cine
de
Cannes
de
2008,
con
sus
267
minutos
de
duración
íntegros.
La
crítica
apoya
la
cinta
de
Soderbergh,
aunque
no
son
tan
entusiastas
como
Villeneuve.
La
primera
parte
tiene
un
68%
por
parte
de
la
crítica,
aunque
en
la
segunda
sube
un
poco
más
y
llega
al
79%.
El
consenso
mantiene
que
es “un
retrato
oscuro,
hipnótico
y
frustrante
de
un
guerrero
en
decadencia.
[…]
la
visión
de
Soderbergh
y
la
actuación
discreta
de
Benicio
Del
Toro
garantizan
que
el
Che
siempre
fascine”.
Lamentablemente,
fue
un
fracaso
en
taquilla
y
solo
recaudó
40,9
millones
en
todo
el
mundo
frente
a
un
presupuesto
de
58
millones.
Dada
la
fuerte
presencia
del
idioma
español,
ningún
inversor
estadounidense
quiso
financiar
el
proyecto.
Tampoco
tuvo
distribución
en
Estados
Unidos,
ya
que
los
grandes
estudios
dejaron
pasar
la
oportunidad
de
hacerse
con
los
derechos.
No
contar
con
este
mercado
sentenció
su
destino,
aunque
en
España
fue
un
estreno
fuerte
y
llegó
a
recaudar
9,7
millones
de
dólares.
De
hecho,
se
encuentra
en
el
puesto
76
de
las
cintas
más
taquilleras
de
nuestra
industria.