Si todavía estás asimilando y dándole vueltas a la posibilidad de poner algún grifos negro o cobre en el cuarto de baño, por ser estos últimos, la última tendencia, te avisamos de que ahora también deberías tener en cuenta una tercera opción; la de los grifos blancos.
Las griferías negras llevan tiempo siendo las más deseadas en esta estancia de la casa por varias razones. Su contraste con paredes alicatadas o pintadas en colores claros (lo más habitual) hace que los grifos, en negro, cobren un inusual protagonismo. El negro es perfecto en baños de estilo industrial y por supuesto, en baños con azulejos tipo metro blancos con juntas negras. También es una gran opción en baños con mamparas de ducha de perfiles negros.
Las griferías de acabado cobre o dorado son capaces de poner la nota sofisticada y vintage a cualquier cuarto de baño.
Y ¿las griferías blancas? ¿Que consigues si te decides por colocar los grifos blancos? Pues además de sumarte a la última tendencia, (recuerda que una tendencia deco entre dura de cinco y diez), el efecto de las griferías blancas en un baño consigue hacer este espacio más luminoso y limpio. Con ellas puedes jugar a que pasen desapercibidas (lo conseguirás en entornos y sanitarios blancos) y que el foco se ponga en otra parte, o al contraste, si apuestas por alicatados con color y sobre todo, por lavabos de colores. Aunque, los grifos blancos, también son para la ducha.
Por ser una opción neutra que casa bien con distintos estilos son una gran opción en baños familiares y donde haya niños porque son más sufridos que los negros.
Y ahora, ¿también entran los grifos blancos entre tus opciones deco?
Imagen de portada The Room Studio
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