El primer ministro italiano, Giuseppe Conte, afirmó que evalúa adelantar 15 días la reapertura de bares y restaurantes en algunas regiones, en medio de fuertes presiones de parte de los gobiernos locales para acelerar la flexibilización de la cuarentena por la pandemia de coronavirus, mientras el país registró este domingo las cifras más bajas de contagios y de víctimas en más de dos meses.

“Estamos recopilando los datos del último monitoreo y con los expertos estamos definiendo reglas claras de seguridad para trabajadores y clientes”, dijo Conte en una entrevista publicada hoy por el diario Corriere, consultado por la posibilidad de abrir los bares y restaurantes el 18 de mayo y no el 1 de junio como previsto por el decreto de fines de abril.

Si a nivel epidemiológico la situación permanece bajo control, podremos acordar algunos avances con las regiones. Lo importante es proceder sobre la base de un monitoreo preciso, porque pagaríamos enormes costos por las imprudencias”, agregó el premier.

Este domingo, la Protección Civil informó que los nuevos casos de coronavirus, 802, son los menores registrados desde el 6 de marzo, en tanto que las víctimas de las últimas 24 horas, 165, son las más bajas desde el 9 de marzo, el día antes de la entrada en vigencia de la cuarentena.

El gobierno italiano se reunirá mañana con representantes de las 19 regiones, según anunció este domingo el presidente de la Emilia-Romaña, Stefano Bonaccini.
El encuentro se da mientras los gobernadores de las regiones de Abruzzo, Calabria, Friuli Venecia Julia, Liguria, Lombardia, Molise, Piamonte, Cerdeña, Umbria y Véneto, opositores al gobierno nacional, reclamaron en una carta a Conte que “desde el 18 cada territorio pueda autorizar las reaperturas”.

En las últimas horas, el gobernador de la Liguria, Giovani Toti, anunció a través de las redes sociales que permitirá que bares, restaurantes y peluquerías abran desde el 18 y que ya este lunes 11 puedan ir a los negocios a hacer los preparativos necesarios.

Mientras, el ministro para las Autonomías y los Asuntos Regionales, Francesco Boccia, planteó hoy en declaraciones televisivas que “desde el 18 habrá una nueva fase, que llevará a una diferenciación por territorios”, como reclaman en parte los gobernadores.

Con 30.560 muertos desde iniciada la pandemia, Italia inició el lunes pasado una salida gradual de la cuarentena con el permiso para hacer deporte al aire libre y para visitar parientes y parejas.
De cara al verano, con miles de puestos de trabajo del sector turístico en riesgo, Conte agregó que “se podrá ir al mar, a la montaña, gozar de nuestras ciudades”.

“Este verano no nos quedaremos en los balcones y la belleza de Italia no se quedará en cuarentena. Sería bello que los italianos pasaran las vacaciones en Italia, incluso si lo haremos de forma distinta, con reglas y cautelas”, agregó.

De todos modos, Conte insistió que se espera “la evolución del cuadro epidemiológico” para definir los detalles del programa para el verano.