Pyongyang mostró dos misiles en un enorme desfile militar

Pyongyang mostró dos misiles en un enorme desfile militar


El gobierno de Corea del Norte buscó dar una muestra de su potencial militar con la exhibición de un misil balístico que puede ser lanzado desde submarino, en un desfile militar celebrado en Pyongyang y apenas minutos después de que el líder Kim Jong-un declarara que Estados Unidos es “el principal enemigo” del país.

El desfile fue al término del congreso del gobernante Partido de los Trabajadores, que no se reunía desde hacía cinco años y una imagen difundida por la estatal agencia KCNA muestra a cuatro camiones militares cada uno paseando un misil de enormes proporciones.

“El arma más potente del mundo, el misil balístico lanzado desde un submarino, entró en la plaza, uno tras otro, demostrando fuertemente el poderío de las fuerzas armadas revolucionarias”, indicó KCNA.

En el desfile también se mostraron cohetes con una “poderosa capacidad de ataque para aniquilar totalmente a los enemigos, de forma preventiva, fuera del territorio”.

Antes de esa parada militar, el titular de Defensa, Kim Jong Gwan, anunció que “las majestuosas unidades de élite y las filas invencibles de la República que cruzarán orgullosamente la plaza Kim Il Sung representan nuestro poder absoluto”.

El desfile fue al término del congreso del gobernante Partido de los Trabajadores

El desfile fue al término del congreso del gobernante Partido de los Trabajadores

La agencia AFP especuló, citando a analistas, que el desfile constituye un mensaje al próximo Ejecutivo de Estados Unidos, que encabezará el demócrata Joe Biden, como forma de presionar en futuras negociaciones o de lograr algunas concesiones.

Kim y Donald Trump -que dejará la Casa Blanca el miércoles próximo- mantuvieron un vínculo que fue de insultos cruzados y amenazas de ataques a elogios varios en varias cumbres diplomáticas que, aún así, no representaron avances de importancia.

El último encuentro fue febrero de 2019 en Hanoi, y estuvo marcado por el sensible tema del levantamiento de sanciones impuestas contra Pyongyang y los compromisos que el régimen norcoreano debía asumir para que eso sucediera.

El cambio de gobierno en Estados Unidos representa un desafío para Corea del Norte, porque a Biden se lo suele asociar con la “paciencia estratégica” de la que hizo gala la administración de Barack Obama, aunque en los debates preelectorales el próximo mandatario norteamericano llamó “matón” a Kim.

El desfile de hoy siguió al Congreso por los 75 años del Partido del Trabajo, el único del país, y en rigor los misiles mostrados fueron de dos tipos distintos: uno balístico intercontinental (ICBM, en inglés) y otro balístico lanzado desde submarino (SLBM, en inglés).

El fin de semana habían circulado versiones, a partir de informes de la inteligencia militar surcoreana y estadounidense, de la chance del desfile, cuyos preparativos se hicieron con enorme secretismo.

De hecho, el domingo, la agencia Yonhap, de Corea del Sur, dijo que el Ejército detectó “señales” de un desfile militar y estimó que podría tratarse de ensayos del que Pyongyang realizó hoy.