En el partido que finalmente perdió el París Saint Germain frente a Nantes por 2-1 en la Ligue 1 de Francia se vivió una extraña situación, que tuvo como protagonista a Ángel Di María.
Leonardo, el director deportivo del PSG, recibió una llamada en el palco del estadio Parque de los Príncipes e, inmediatamente, bajó hasta el propio terreno de juego para hablar con Mauricio Pochettino, el entrenador argentino del equipo.
Segundos después, el técnico del PSG pidió el cambio y Di María fue sustituido. Los tres, Di María, Pochettino y Leonardo, estuvieron unos segundos hablando en el túnel que lleva a los vestuarios, hasta que Pochettino volvió al campo para seguir dirigiendo al equipo y Di María y Leonardo entraron a los vestuarios.
Según las primeras informaciones desde Francia, a través de L’Équipe y Europe 1, el futbolista habría sufrido un robo dentro de su casa durante el partido, con el agravante que su familia se encontraba dentro del domicilio.
Según habría dicho el propio Leonardo, la familia del “Fideo” estaba “secuestrada”. Mientras que las últimas informaciones agregan que la familia está sana y a salvo de los delincuentes.
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