El barco Razoni sali del sureo puerto ucraniano de Odesa sobre el mar Negro con 26000 toneladas de cereales destinadas al Lbano Foto AFP
El barco “Razoni” salió del sureño puerto ucraniano de Odesa, sobre el mar Negro, con 26.000 toneladas de cereales destinadas al Líbano. Foto: AFP

Un buque cargado de cereales zarpó este lunes de Ucrania, el primero desde el inicio de su guerra con Rusia, en virtud de un acuerdo internacional que se espera libere grandes cantidades de granos a los mercados mundiales y alivie una crisis alimentaria e inflacionaria global.

El barco ‘Razoni’ salió del sureño puerto ucraniano de Odesa, sobre el mar Negro, con 26.000 toneladas de cereales destinadas al Líbano, donde llegará tras ser inspeccionado mañana en Estambul en cumplimiento del acuerdo, que se firmó el mes pasado en esa ciudad turca con mediación de la ONU y de Turquía.

El Gobierno ucraniano del presidente Volodimir Zelenski dijo que la reanudación de las exportaciones era “un alivio para el mundo” y algo promisorio para la economía del país, mientras que el vocero del presidente ruso, Vladimir Putin, la calificó de “muy positiva”.

El 22 de julio, representantes de Ucrania y Rusia firmaron acuerdos separados en Estambul destinados a permitir la salida de 22 millones de toneladas de granos y otros productos agrícolas bloqueados en puertos ucranianos del mar Negro debido a la invasión militar rusa iniciada el 24 de febrero pasado.

Los acuerdos también permiten a Rusia exportar sus productos agrícolas y fertilizantes, a pesar de las sanciones que Occidente le impuso por la invasión.

Es el primer barco que sale con granos desde que comenz la agresin rusa Foto AFP
Es el primer barco que sale con granos desde que comenzó la agresión rusa. Foto: AFP

La ONU y Turquía han dicho que estos dos acuerdos deberían ayudar a aliviar una creciente crisis alimentaria mundial provocada por la salida del mercado de dos de los mayores exportadores de trigo, cebada y girasol, así como una ola inflacionaria global resultante de un severo aumento del precio de los alimentos.

El acuerdo contempla la salida de barcos con granos de Odesa y otros dos puertos ucranianos a través de corredores seguros. Los buques serán inspeccionados en Estambul, que se ubica en el pasaje desde el mar Negro al Mediterráneo, por funcionarios ucranianos, rusos, turcos y de la ONU que integran un llamado “centro de coordinación”.

El ministro de Infraestructura ucraniano, Oleksandr Kubrakov, que firmó el acuerdo en nombre de su país, tuiteó un video del ‘Razoni’ haciendo sonar su sirena al navegar mar adentro.

“El primer barco con granos desde que comenzó la agresión rusa ha salido del puerto”, escribió Kubrakov en Twitter.

“Gracias al apoyo de todos nuestros países asociados y a la ONU fuimos capaces de implementar de manera plena el Acuerdo firmado en Estambul. Es importante para nosotros ser uno de los garantes de la seguridad alimentaria” mundial, agregó.

El Ministerio de Defensa turco dijo que otros barcos zarparán tras este primer envío respetando “el corredor (marítimo) y las formalidades acordadas”, informó la agencia de noticias AFP.

Otros 16 buques, todos bloqueados por la guerra, están atracados en Odesa en espera de su turno, y más les seguirán, dijeron autoridades ucranianas.

Los cereales se dirigían al puerto libanés de Trípoli, en el Mediterráneo oriental.

El Líbano, un pequeño país árabe de Medio Oriente, está inmerso en lo que el Banco Mundial ha descrito como una de las mayores crisis financieras del mundo en más de 150 años.

En 2020, una explosión catastrófica en el puerto de Beirut, su capital, devastó la ciudad y destruyó varios silos de granos ubicados en la zona portuaria, parte de los cuales colapsaron justamente ayer luego de un incendio de una semana de duración.

El secretario general de la ONU, António Guterres, saludó “calurosamente” la salida del barco desde Odesa, dijo un vocero en un comunicado.

Guterres “espera que este sea el primero de muchos buques comerciales que se desplacen en conformidad con el acuerdo firmado, y que aporte la indispensable estabilidad y asistencia a la seguridad alimentaria mundial, especialmente en los contextos humanitarios más frágiles”, dijo la nota.

Kubrakov dijo que las exportaciones también serán un bálsamo para la devastada economía de Ucrania.

“Desbloquear los puertos aportará al menos 1.000 millones de dólares en ingresos para la economía, así como una oportunidad para que el sector agrícola pueda hacer planes para el año que viene”, dijo en Facebook.

El canciller de Ucrania, Dmitro Kuleba, también expresó su beneplácito por la reanudación de las exportaciones de granos.

“Jornada de alivio para el mundo, especialmente para nuestros amigos de Medio Oriente, Asia y África. Los primeros cereales ucranianos dejan Odesa después de meses de bloqueo ruso. Ucrania siempre ha sido un socio fiable y seguirá siéndolo si Rusia cumple con su parte del acuerdo”, afirmó el ministro en Twitter.

En Moscú, el vocero del Kremlin y de Putin dijo que la salida del buque era “muy positiva, una buena oportunidad para probar la eficacia” del acuerdo de Estambul.

“Esperamos que los acuerdos sean aplicados por todas las partes y que los mecanismos funcionen eficazmente”, agregó Dmitri Peskov.

La salida del buque coincide con fuertes combates en Ucrania.

La Presidencia ucraniana dijo este lunes que al menos tres civiles murieron y otros 16 resultaron heridos en las últimas 24 horas en ataques rusos en la provincia oriental de Donetsk, donde tienen lugar las hostilidades más intensas.

El Gobierno ucraniano ha decretado la evacuación obligatoria de la población de Donetsk, y el gobernador de la provincia, Pavlo Kirilenko, enfatizó la necesidad de evacuar a unos 52.000 niños que permanecen allí.

En Jarkov, la segunda ciudad de Ucrania, en el noreste, dos personas resultaron heridas hoy por un bombardeo ruso, dijeron autoridades locales.

Funcionarios de la sureña ciudad ucraniana de Mikolaiv también denunciaron ataques rusos que desataron un incendio cerca de un establecimiento médico y destruyeron un cargamento de ayuda humanitaria consistente en medicamentos y comida.