En los últimos años, a raíz de la pandemia, se ha apreciado un gran interés en aumentar el confort del hogar para disfrutar de espacios de ocio privados. En la mayoría de las casas que tienen piscina, no se vacía el agua en el invierno y una buena cubierta puede permitir disfrutar de agradables baños otoñales, minimizar la evaporación del agua, reducir los costes de calefacción y también reforzar la seguridad infantil y de las mascotas.
Cubiertas altas como la de la foto de portada, constituyen además una solución ideal para crear espacios de relax, para hacer deporte o incluso salones exteriores, con un toque invernadero de jardín. Se trata de una estructura de diseño, ligera y modulable, una solución de microarquitectura que aporta un gran valor añadido al hogar, sobria y elegante.
La ultra baja es una cubierta telescópica refinada y moderna con el diseño más plano de la gama que permite extender el uso de la piscina de cuatro a seis meses, además de ofrecer una perfecta integración en el entorno y liberar el máximo de espacio alrededor del vaso. Destaca por sus módulos encajables, que dan forma a un modelo ligero, manejable y de fácil acceso, fabricado en policarbonato alveolar que proporciona un tratamiento anti rayos-UV.
La cubierta telescópica de media altura aporta un toque de modernidad al jardín y tiene un funcionamiento que facilita aún más el uso: la pared de entrada de la cubierta se puede mover hacia arriba y sus módulos se pueden deslizar en ambos sentidos, de izquierda a derecha y viceversa, para poder acceder al vaso por ambos lados, garantizando una facilidad de uso incomparable.
La cubierta All in One ofrece una gran variedad de opciones para acceder al vaso y darse un baño desde el inicio de la primavera y hasta finales de otoño, extendiendo así varios meses su uso. Incluye un frontal desmontable, trampilla, elevación de los módulos y deslizamiento total o parcial de la cubierta, lo que le convierte en un modelo completo y de fácil manejo.
Dentro de los modelos de cubierta que permiten disfrutar de la piscina todo el año, destaca también esta impresionante cubierta alta fija mural diseñada para espacios de grandes dimensiones. Una configuración adoptada por numerosos profesionales de la hostelería y la restauración para terrazas cubiertas amovibles con un aire de veranda, lo que les permite desestacionalizar sus servicios.
Una cubierta inteligente acumula calor y eleva la temperatura del agua entre 6 y 8 grados para aquellas piscinas no climatizadas. Además, en los meses otoñales, las cubiertas evitan que al agua se contamine con hojas, polen o insectos. Este grado de protección supone un uso limitado de productos de limpieza y genera un menor consumo hídrico en su mantenimiento.
Por otra parte, en invierno, las piscinas vacías o heladas sin ninguna protección producen un elevado gasto a la hora de rehabilitarlas para el futuro baño en primavera y verano. Así pues, los más de 25 años de experiencia de la marca constatan que las cubiertas de piscinas climatizadas minimizan la evaporación del agua y reducen los costes de calefacción entre un 50 % y un 70 % por debajo del consumo habitual. Además, Abrisud apuesta por la energía fotovoltaica y todos sus diseños pueden ser alimentados con energía solar.
Más información | ASOFAP (Asociación española de profesionales de las piscinas) y Abrisud
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