Corea del Norte disparó este sábado un misil balístico con dirección hacia el mar de Japón, el cuarto en menos de 24 horas, informó la agencia de noticias Yonhap citando fuentes del Estado Mayor Conjunto de Corea del Sur.
Los militares analizan el alcance, la altura y la velocidad del cohete que, por la diferencia horaria, se convirtió en el primero en ser lanzado en 2023.
Horas antes, el mismo medio informó del lanzamiento desde Corea del Norte de tres misiles balísticos de corto alcance hacia el mar de Japón, con los que Pyongyang cerró un año récord en número de pruebas armamentísticas.
Fueron detectados “tres misiles de corto alcance lanzados por Corea del Norte al mar del Este”, también conocido como mar de Japón, informó el Estado Mayor Conjunto de Corea del Sur en un comunicado replicado por la agencia de noticias AFP.
Los proyectiles, que volaron alrededor de 350 kilómetros antes de caer al mar, fueron disparados cerca de las 8 de la mañana del sábado (las 23 de ayer en Argentina) y desde la zona del condado de Chunghwa, en la provincia de Hwanghae del Norte, cerca de la capital Pyongyang.
La agencia de noticias japonesa Kyodo indicó que los tres cayeron fuera de la zona económica exclusiva de Japón.
“Nuestras fuerzas armadas se mantienen en posición de preparación máxima, mientras cooperan con Estados Unidos y refuerzan la vigilancia”Estado Mayor Conjunto de Corea del Sur
El Gobierno nipón envió a Corea el Norte una protesta contra los lanzamientos a través de la embajada en Beijing, reportó la agencia.
La tensión militar en la península de Corea aumentó significativamente este año ante el récord de disparos desarrollados por Corea del Norte, que incluyó su misil balístico intercontinental más avanzado hasta la fecha.
Corea del Sur respondió a estos ensayos aumentando sus maniobras militares conjuntas con Estados Unidos o con otras pruebas de armamento, como el lanzamiento ayer de un cohete espacial de combustible sólido.
“Nuestras fuerzas armadas se mantienen en posición de preparación máxima, mientras cooperan con Estados Unidos y refuerzan la vigilancia”, precisó el Estado Mayor Conjunto de Corea del Sur.
El lunes, la intrusión de drones norcoreanos, uno de los cuales llegó a volar cerca de Seúl, provocó el despliegue de aviones de combate y helicópteros de ataque surcoreanos que de todos modos no pudieron interceptarlos, lo que provocó amplias críticas y una disculpa del ministro de Defensa surcoreano.
Se trató de la primera vez en cinco años que drones de Corea del Norte sobrevolaron el espacio aéreo del Sur.
El aislado país comunista, sujeto desde 2006 a fuertes sanciones de la ONU por su programa nuclear y armamentístico, celebra estos días una importante reunión del partido único en el poder.
En ella, el líder norcoreano Kim Jong-un y otros altos cargos presentan los objetivos políticos para 2023 en áreas como diplomacia, seguridad y economía.
El miércoles pasado, Kim presentó “nuevas metas claves para fortalecer la capacidad defensiva autosuficiente en 2023”, indicó la prensa estatal, que no detalló estos objetivos. Se espera que su contenido sea develado una vez concluya la reunión.
En 2021, Kim se centró en cuestiones económicas, pero los analistas pronostican que este año la estrategia estará más dirigida al frente militar.
A raíz de esta serie inédita de lanzamientos, Estados Unidos y Corea del Sur advierten desde hace meses que Pyongyang se prepara para realizar el séptimo ensayo nuclear de su historia.
Meses atrás, Kim advirtió que su país quería convertirse en la mayor potencia nuclear del mundo y declaró “irreversible” su arsenal atómico.
En total, en 2022 Corea del Norte realizó unos 40 lanzamientos de misiles balísticos.