El uso es obligatorio para todos los mayores de seis años en exteriores y espacios públicos cerrados.

El uso es obligatorio para todos los mayores de seis años en exteriores y espacios públicos cerrados.

La región española de Extremadura anunció el uso obligatorio de tapabocas para evitar la propagación del nuevo coronavirus, una medida tomada esta semana por las autoridades de Cataluña y las islas Baleares, que también está siendo considerada por otras cuatro autonomías.

Desde el inicio de la etapa de nueva normalidad en España, el 21 de junio, el Gobierno impuso –bajo una multa de 100 euros– el uso de mascarillas en transportes, lugares cerrados y espacios públicos donde no pueda respetarse la distancia mínima de 1,5 metros, pero la aparición de rebrotes en algunos territorios ha llevado a tres regiones a extender su empleo.

Las autoridades de la región occidental de Extremadura informaron que, a partir de esta medianoche, impondrán el uso obligatorio del cubrebocas para todos los mayores de seis años en exteriores y espacios públicos cerrados, con independencia de que se cumpla la distancia de seguridad.

La medida se tomó con el fin de evitar una transmisión comunitaria descontrolada del virus en dicha jurisdicción, donde actualmente hay 66 casos activos, dijeron las autoridades, según informó la agencia de noticias española EFE.

Según la nueva normativa, el tapabocas deberá usarse en parques, piletas, centros de trabajo y terrazas, entre otros, y su incumplimiento conllevará multas de hasta 6.000 euros, en función del riesgo ocasionado a la salud pública.

El primer territorio en adoptar esta decisión fue Cataluña, escenario de uno de los mayores rebrotes de la Covid-19 en el país, donde desde ayer todos los mayores de seis años que no tengan contraindicación deben llevar puesto el tapabocas fuera de sus domicilios, salvo durante la práctica deportiva, al comer o beber, en playas y piscinas, o en gimnasios.

En tanto, en las islas Baleares, la medida comenzará a regir el próximo lunes y su incumplimiento se multará con 100 euros.

A la directiva sobre las mascarillas, el Ejecutivo balear sumó también la prohibición de reuniones de más de 70 personas al aire libre y de 30 en espacios cerrados, que de no respetarse supondrá multas de hasta 600.000 euros.

Las disposiciones causaron polémica entre los comerciantes locales, ya que el archipiélago es uno de los destinos turísticos más populares entre los europeos.

Pese a las críticas, la vocera del Gobierno balear, Pilar Costa, afirmó que estas medidas no tienen ánimo recaudatorio, sino que buscan el equilibrio entre garantizar una buena salud y reactivar la economía.

A las medidas adoptadas por estas regiones podrían sumarse próximamente los territorios de Cantabria, Asturias, Aragón y Murcia, cuyas autoridades señalaron esta última semana estar evaluando la obligatoriedad del tapabocas para evitar nuevos rebrotes de la enfermedad.

Con más de 253.000 casos y más de 28.000 muertes, España es uno de los países más golpeados por la pandemia en Europa, y es el séptimo con más fallecimientos a nivel mundial, según datos de la Universidad Johns Hopkins.