Hace tiempo que The Walking Dead dejó de ser el fenómeno que empezó con la serie original y que acabó derivando en una franquicia que sigue en aumento, pero está claro que la saga de muertos vivientes sigue siendo uno de los grandes pilares de ficción de AMC y las cifras hablan por sí solas. Al mismo tiempo, las decisiones de la cadena de seguir produciendo ‘spin-off’ y posteriormente también de renovarlos, hablan bastante bien de la confianza que tiene la compañía sobre The Walking Dead por mucho que los grandes números hace años que quedasen atrás.

En el caso de The Walking Dead: The Ones Who Live, estrenada el pasado domingo 25 de febrero al otro lado del charco y el lunes 26 en nuestro país de la mano de AMC+, el debut del primer episodio ha demostrado que los espectadores tenían muchas ganas de volver a reencontrarse con Rick (Andrew Lincoln) y Michonne (Danai Gurira) y descubrir de una vez por todas qué había sido de ellos y si volverían a encontrarse.

El primer episodio del nuevo ‘spin-off’, ‘Years’ (1×01), por fin reveló qué había sido de Rick Grimes después de haber sido recogido por el helicóptero y, según los datos compartidos por AMC que ha publicado Deadline, lo hizo con una audiencia de récord: según la citada publicación, el debut de la serie reunió 3 millones de espectadores en sus tres primeros días de disponibilidad en la plataforma, lo que supone el mejor debut para una nueva serie en seis años, concretamente desde 2018, con la premiere de la serie The Terror.

Además, en lo que se refiere a la plataforma de ‘streaming’ AMC, el primer episodio de The Walking Dead: The Ones Who Live es el episodio más visto de cualquier serie en la historia de AMC+ y, aunque no se revelan detalles específicos, también ha superado los datos de cualquier temporada de estreno en la plataforma.

‘The Walking Dead’ se atreve a lo que la serie original no quiso hacer en 10 años y da la sorpresa cuando ya nadie contaba con ello

The Ones Who Live no es la primera serie de la franquicia que hace buenos datos en AMC. Ya le ocurrió a The Walking Dead: Dead City, el ‘spin-off’ protagonizado por Maggie y Negan y ambientado en Nueva York, que en 2023 logró ser la premiere más fuerte de la historia de AMC+ en sus tres años de trayectoria; mientras que The Walking Dead: Daryl Dixon la superó solo unos meses después. Ambas han sido renovadas por una segunda temporada.

Ahora, Rick y Michonne han vuelto a superar el récord y mantiene la buena racha de la franquicia.

Sin embargo, que la serie creada por Scott M. Gimple y Danai Gurira haya comenzado con buen pie y que la franquicia siga siendo un éxito en AMC no quiere decir que mantenga su condición de fenómeno. De hecho, nada más lejos de la realidad. Aunque en sus últimas temporadas la serie original tuvo que mantenerse en una media de 3-4 millones de espectadores, la ficción llegó a amasar cifras de audiencia de infarto en un escenario en el que el ‘streaming’ todavía no se había convertido en un modo de vida.

La temporada de The Walking Dead con una media mayor de espectadores fue la quinta, con 14 millones de media por episodio en toda la temporada, mientras que el primer episodio de la séptima temporada -el que reveló la identidad de las víctimas de Negan- fue el más visto de su trayectoria con 17 millones de espectadores. Cifras de infarto que, tirando por lo bajo, como mínimo superaban en 10 millones su récord actual.

Aunque The Ones Who Live consta de seis episodios, aún está por ver si, como los anteriores ‘spin-off’, renueva por una segunda temporada.