Una vez más, la pareja decidió no posar en la alfombra roja, pero ella lo estuvo apoyando desde muy cerquita y él le dio las gracias

Yo todavía no sé qué tiene Ryan Gosling peor lo tiene. No me parece un hombre especialmente guapo, así que no sé si ese atractivo que desprende se lo debe a cómo caló en nuestras cabezas adolescentes El Diario de Noah, su papel arrebatador en la mejor comedia romántica de todos los tiempos, Crazy Stupid Love, ese papel de conquistador conquistado por Emma Stone, la primera vez, luego vendría La La Land, otra razón para que guste, o quizás simplemente sea que es solo, nada más y nada menos, que Ken.

Pero en realidad también podría ser por cómo adora a su esposa, la también actriz Eva Mendes. Y porque no se cansa de demostrarlo, a pesar de que sus apariciones públicas como pareja se pueden contar con los dedos de una mano. Pero es que no lo necesitan, ni el uno ni el otro y la última prueba de ello la hemos vivido durante la noche de los Oscars, cuando una vez más decidieron no posar ante las cámaras de la “red carpet”.

En su lugar, Ryan Gosling asistió a la gala de premios con su madre, Donna Gosling, su hermana, Mandi Gosling, con la que sí que apareció en la alfombra roja para saludar a la prensa, y su padrastro, Valerio Attanasio. Que sí, tiene nombre de estrella de telenovela de los 80 y 90 que aún vive de semejantes créditos. O de heredero griego, de eso también.

Sin embargo, que ambos no llegasen de la mano al Dolby Theatre de Los Ángeles no quiere decir que la intérprete no estuviera junto a su marido en una noche tan especial. De hecho estuvo muy cerquita de él, en su camerino, algo de lo que dio fe a través de un par de publicaciones que ella subió a su cuenta de Instagram: una primera en la que salía con un “look” dominado por el “denim” con un título que rezaba “Always by my man”, es decir, “siempre al lado de mi hombre”; y otra en la que salía ataviada con la ya icónica chaqueta rosa Barbie y el sombrero de cowboy negro que Gosling lució durante su increíble actuación de I’m just Ken en la gala de los Oscars, de lo mejor de la noche. Además, esta foto iba acompañada de un textito bastante gracioso que decía “You took Ken all the way to the Oscars. Now come home, we need to put the kids to bed”, lo que quiere decir “has conseguido llevar a Ken hasta los Oscars. Ahora vamos a casa, que tenemos que llevar a los niños a la cama”.

No obstante, no solo fue Eva Mendes la que le mostró su apoyo y su cariño a Gosling, sino que el gesto fue recíproco. Como puede que recuerdes y te conté en su momento, el actor suele llevar un colgante con una E al cuello, como descubrimos durante el “tour” promocional de Barbie, así que aprovechó su gran momento al micro para coger la letra y darle un beso al final de su actuación, un momento que quedó grabado en cámara.